
DENVER, CO – Después de un prometedor repunte en el empleo juvenil el verano pasado, las proyecciones actuales pintan un panorama menos optimista para los adolescentes que buscan trabajo. La incertidumbre económica ha llevado a los empleadores a ajustar sus planes de contratación, anticipando una disminución en las oportunidades disponibles para el grupo de edad de 16 a 19 años.
Según los análisis de Challenger, Gray & Christmas Inc., la firma especializada en tendencias laborales, se espera que este verano se generen alrededor de 1 millón de empleos para adolescentes, una cifra notablemente inferior a la del año anterior. Si bien la empresa había proyectado 1.3 millones de empleos para el verano de 2024, sus estimaciones revisadas indican que solo 1.1 millones de adolescentes fueron contratados finalmente. Esta revisión a la baja subraya la volatilidad del mercado laboral en tiempos de inestabilidad económica.
Andrew Challenger, experto en empleo y vicepresidente sénior de Challenger, Gray & Christmas, Inc., comentó sobre la situación: “Durante los últimos veranos, hubo muchas oportunidades para los adolescentes, pero parecían evitarlas. Este verano, es posible que no veamos las oportunidades concretas. Con el clima sociopolítico actual, podríamos ver menos turistas; con el impacto previsto de los aranceles, podríamos ver precios más altos y una menor demanda de los consumidores. Quienes tradicionalmente contratan en verano podrían esperar este año”.
Históricamente, el mercado laboral de verano para adolescentes ha mostrado fluctuaciones significativas. Desde 1998, el promedio de empleos creados para este grupo demográfico cada verano ha sido de 1.45 millones. A finales de la década de 1990, la fuerza laboral adolescente alcanzó su punto máximo con más de 8 millones de trabajadores en verano, cifra que descendió de manera constante durante la década de 2000, sufriendo un golpe considerable con la recesión de 2008-2009. En 2011, apenas 5 millones de adolescentes formaban parte de la fuerza laboral de verano. No obstante, el verano pasado se registró un notable ascenso, con 6.6 millones de adolescentes empleados, el total más alto desde 2008. De este grupo, un significativo 41% encontró trabajo en el sector de servicios.
Este pronóstico de una menor contratación sugiere que los adolescentes interesados en trabajar este verano deberán ser más proactivos y persistentes en su búsqueda de empleo, enfrentándose a un entorno más competitivo y con menos vacantes disponibles.