Bennet busca suceder a Jared Polis: El senador federal entra a la contienda por la gobernación

DENVER — El senador estadounidense Michael Bennet, una de las figuras políticas más reconocidas de Colorado, anunció este viernes su candidatura para gobernador en las elecciones de 2026. Bennet, demócrata con más de 15 años en el Congreso, buscará reemplazar al actual mandatario Jared Polis, quien no puede postularse para un tercer mandato consecutivo.

El anuncio formal se dio por medio de una publicacion en sus redes sociales, donde Bennet destacó su trayectoria legislativa y prometió llevar su enfoque “pragmático y progresista” a la gobernación. “Los mejores desafíos de Colorado no se resolverán con la política rota de Washington ni el caos de Trump, sino aquí, con soluciones reales”, declaró.

Bennet llega a la contienda con ventaja en las encuestas: un reciente sondeo del Colorado Polling Institute lo ubica como uno de los funcionarios mejor evaluados, con un 45% de favorabilidad frente a un 31% de opiniones negativas (+14 neto). Supera incluso al fiscal general Phil Weiser, otro demócrata que anunció su candidatura.

Primarias demócratas competitivas
La carrera por la nominación demócrata promete ser reñida. Weiser, exdecano de la Universidad de Colorado, ya ha recaudado fondos y consolidado apoyos en el ala progresista del partido. Mientras tanto, la secretaria de Estado Jena Griswold —otra potencial contendiente— optó por postularse a fiscal general, dejando el campo más despejado para Bennet.

Andy Boian, confirmó en Colorado Point of View que el senador centrará su mensaje en economía, infraestructura y protección ambiental, capitalizando su experiencia en el Congreso, donde impulsó la ampliación del Child Tax Credit y gestionó $7 mil millones para obras en el estado.

Republicanos en espera
Por ahora, el Partido Republicano no ha presentado candidatos oficiales, aunque se especula con nombres como el representante estatal Gabe Evans (18%/23% fav/unfav en la encuesta) o incluso una sorpresiva participación de Lauren Boebert, cuya alta desaprobación (-34 neto) podría ser un obstáculo.

La campaña de Bennet arranca con una ventaja inicial, pero deberá navegar un electorado dividido y el creciente descontento con la política nacional. Con Polis fuera de la contienda, Colorado tendrá por primera vez en ocho años una batalla abierta por la mansión gubernamental.