La gobernación de Colorado firmó hoy la HB25-1001 en la Mansión Boettcher, una nueva ley que fortalece los derechos laborales al imponer sanciones más severas a empleadores que no paguen salarios justos. La medida prohíbe descuentos del salario mínimo, permite hacer públicos a infractores y responsabiliza directamente a dueños de empresas. También protege a trabajadores frente a intimidación por estatus migratorio y aumenta los montos reclamables a $13,000.