A pesar de 20 puñaladas y 11 contusiones, la muerte de Ellen Greenberg fue declarada suicidio. El patólogo cambió de opiniónEricks Webs DesignEricks Webs Design

Hace 14 años, en una tarde nevada en Filadelfia, Ellen Greenberg fue encontrada muerta en el suelo de la cocina de su apartamento. Tenía 20 heridas de cuchillo y numerosas contusiones. Las autoridades dictaminaron que se había suicidado.

Greenberg era una maestra de 27 años. Sus padres insistieron en que había sido asesinada. Lucharon para que se modificara la sentencia. Ahora, tras años de investigación, múltiples demandas y una petición en internet que atrajo más de 166.000 firmas, el patólogo que realizó la autopsia dice que cambió de opinión.

El Dr. Marlon Osbourne firmó este viernes un documento en el que afirma que, tras considerar la nueva información del caso, ya no cree que Greenberg se suicidara. Los padres de Greenberg resolvieron sus demandas contra Osbourne durante el fin de semana, dijo uno de sus abogados.

Y este lunes, justo antes de que se constituyera un jurado en otra demanda de los Greenberg contra varios funcionarios municipales, el resto de las partes llegaron a un acuerdo en ambas demandas. Los Greenberg pedían daños y perjuicios por lo que llamaban una “conspiración para encubrir el asesinato de Ellen”.

La portavoz municipal de Filadelfia, Ava Schwemler, declaró que, aunque los funcionarios municipales no admitieron su responsabilidad, los Greenberg recibirán un pago monetario -cuyo importe se revelará más adelante- y la Oficina del Médico Forense de la ciudad volverá a examinar el caso Greenberg.

“Estamos muy emocionados”, dijo Sandee, la madre de Greenberg, a CNN por teléfono después de conocer la noticia de la revocación del Dr. Osbourne. “Quiero decir, ni en mis sueños más osados pensé que algo así iba a suceder”.

Todos estos acontecimientos podrían despejar el camino para que los padres de Greenberg consigan lo que han querido todo este tiempo: una investigación criminal sobre la muerte de su hija.

“Esto es por lo que han estado luchando”, dijo Will Trask, uno de sus abogados.

El abogado de Osbourne, Marc Bailkin, declinó hacer comentarios cuando se lo contactó por teléfono.

Cuando un periodista de CNN le preguntó si la declaración atribuida a Osbourne era auténtica, respondió: “Lo es. Habla por sí misma”.

Todo comenzó el 26 de enero de 2011. A las 6.30 p.m., el prometido de Greenberg, Sam Goldberg, llamó al 911 y dijo: “Acabo de entrar en mi apartamento; mi prometida está en el suelo con sangre por todas partes.”

Pasaron más de dos minutos hasta que Goldberg mencionó por primera vez un detalle espeluznante: un cuchillo sobresalía del pecho de Ellen.

“¡Se ha apuñalado a sí misma!”, dijo.

“¿Dónde?”, dijo el operador del 911.

“Se cayó sobre un cuchillo”, dijo Goldberg.

Al día siguiente, el Dr. Osbourne realizó una autopsia. Observó las numerosas heridas de arma blanca, así como contusiones en diversas etapas de curación. Dijo que había sido “apuñalada por otra persona” y dictaminó que se trataba de un homicidio.

Pero la Policía de Filadelfia trató la muerte como un suicidio desde el principio. Los investigadores estaban tan convencidos de que Ellen se había suicidado que abandonaron el lugar sin llamar a la Unidad de Escena del Crimen.

Cuando los investigadores regresaron, el apartamento había sido limpiado por profesionales. Las posibles pruebas habían sido borradas.

La Policía se aferró a su determinación de suicidio, en parte porque parecía que Ellen había estado sola cuando murió. Los investigadores pensaban que la puerta estaba cerrada desde dentro con un pestillo de barra oscilante, y los informes iniciales indicaban que Goldberg había estado acompañado por un guardia de seguridad mientras forzaba la puerta.

Osbourne dijo más tarde en una declaración: “Ella es la única que se encontró en el apartamento, sin nada revuelto, nada fuera de lugar, ninguna otra forma de entrar allí, no se presta al hecho de que alguien más estuviera allí para hacerlo. Así que se descartó”.

Tras consultar con las fuerzas del orden, Osbourne modificó el certificado de defunción a “suicidio”. Oficialmente, Ellen Greenberg se había suicidado.

Pero sus padres no aceptaron esa conclusión. Como dijeron más tarde, querían exonerar a su hija. Y uno por uno, encontraron expertos que estaban de acuerdo.

El célebre patólogo Cyril Wecht dijo que el caso era “fuertemente sospechoso de homicidio”. Un reconstructor de escenas del crimen dijo que parecía que el cuerpo de Greenberg había sido movido. Y otro patólogo externo, Wayne Ross, señaló una hemorragia en los músculos del cuello que, en su opinión, era indicativa de estrangulamiento. Escribió que las diversas contusiones en su cuerpo “eran consistentes con una paliza repetida”.

En cuanto a las afirmaciones sobre la puerta del apartamento, eran menos ciertas de lo que parecían en un principio.

Melissa Ware, administradora del edificio de apartamentos de Greenberg, dijo a CNN que el pestillo de la puerta no demostraba que Greenberg se hubiera encerrado. Era posible, dijo, que el pestillo se abriera solo al cerrarse la puerta. A ella le había ocurrido, dijo.

Un guardia de seguridad dijo que no había estado allí cuando el novio forzó la puerta. Y a pesar de que dos familiares afirmaron que habían estado hablando por teléfono con Goldberg cuando éste forzó la puerta, un análisis de CNN de los registros telefónicos y otras pruebas parecía contradecir esa afirmación.

El pasado noviembre, Goldberg hizo declaraciones a CNN en las que lamentaba lo que denominaba “los patéticos y despreciables intentos de profanar mi reputación y su intimidad creando una narrativa que abarca mentiras, distorsiones y falsedades para evitar la verdad”. La enfermedad mental es muy real y tiene muchas víctimas”.

Pero este viernes, un juez dictó una sentencia que habría permitido que la segunda demanda de los Greenberg fuera a juicio con jurado. Siguieron una serie de maniobras legales. Y el Dr. Osbourne -ahora patólogo en Pompano Beach, Florida- firmó un documento que modificaba su postura, mantenida durante mucho tiempo, sobre la muerte de Greenberg.

Escribió: “Es mi opinión profesional que la forma de muerte de Ellen debe designarse como algo distinto al suicidio”.

Trask, uno de los abogados de los Greenberg, dijo que Osbourne produjo la declaración como una forma de resolver la demanda con los Greenberg. Dijo que los Greenberg acordaron este lunes liberar a Osbourne de la demanda.

La declaración de Osbourne citaba “información adicional” que había obtenido desde que emitió el certificado de defunción modificado:

“Ahora tengo conocimiento de que existe información que pone en duda, por ejemplo, si el prometido de Ellen fue visto entrando al apartamento antes de hacer la llamada al 911 el 26 de enero de 2011; si la puerta fue forzada como se informó; si el cuerpo de Ellen fue movido por otra persona dentro del apartamento con ella en el momento o cerca del momento de su muerte; y los hallazgos de Lindsey Emery, M.D., en su evaluación neuropatológica de la muestra del segmento cervical de Ellen.

Emery, neuropatóloga de la Oficina del Médico Forense de Filadelfia, dijo en una declaración de 2021 que parecía que Greenberg había sido apuñalada en la nuca después de muerta. Más tarde presentó una declaración en la que se retractaba de esa conclusión y decía que podría haber habido otras explicaciones para la falta de respuesta vital en una de sus heridas.

Con la salida de Osbourne, quedaban dos acusados al comenzar la selección del jurado este lunes por la mañana: Sam Gulino, exjefe médico forense de la ciudad, y el detective de Policía, John McNamee. Ambos han negado haber actuado mal en el caso.

Poco antes de las 11:30 de la mañana, uno de los familiares de Greenberg en el juzgado informó de que los miembros del jurado habían sido despedidos. Minutos después, el abogado de Greenberg, Joe Podraza, hizo una declaración a los periodistas.

“Hemos resuelto el asunto”, dijo, añadiendo que la segunda demanda de los Greenberg, que exigía que la oficina del médico forense cambiara su dictamen sobre la causa de la muerte de Ellen, también se había resuelto. Esa demanda estaba pendiente en la Corte Suprema de Pensilvania.

CNN se puso en contacto con el departamento de Policía de la ciudad, la oficina del médico forense y la oficina del alcalde, así como con dos abogados que representan a Gulino y McNamee. Ninguno había respondido en el momento de la publicación de este artículo.

La nueva conclusión del Dr. Osbourne no es vinculante para la ciudad. Reconoció en su declaración que “ya no estoy facultado para enmendar yo mismo el certificado de defunción de Ellen porque ya no mantengo una licencia médica de Pensilvania y ya no estoy empleado por la oficina del Médico Forense de Filadelfia”.

“Mire, los Greenberg llevan 14 años luchando contra esto”, dijo Trask, uno de sus abogados. “Están agotados. Gastaron su jubilación en este caso. Están listos para cerrarlo”.

Y añadió: “Lo único que querían era que el Dr. Osbourne admitiera que se equivocó y que su hija no se suicidó. Y eso es lo que consiguieron. Y el resto fue la guinda del pastel”.

Contactado por teléfono este lunes por la tarde, el padre de Greenberg, Josh, dijo que se sentía como si acabara de hacer y aprobar un examen muy difícil.

“Hemos luchado mucho para conseguir esto”, dijo. “Para conseguir justicia para nuestra hija. Y lo conseguimos”.

The-CNN-Wire
™ & © 2025 Cable News Network, Inc., a Warner Bros. Discovery Company. All rights reserved.