El presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, informó este sábado a los republicanos en una reunión a puerta cerrada que Donald Trump estaba a favor de presentar su agenda como un paquete de gran alcance, según fuentes asistentes al encuentro, un anuncio clave lleno de riesgos, pero que sienta las bases para avanzar en los ambiciosos planes del presidente electo.

El esfuerzo por incluir políticas fronterizas, energéticas y fiscales en un único proyecto de ley supone un cambio respecto a la postura que ha mantenido el líder republicano en el Senado, John Thune, pero también representa una evolución en cómo el equipo de Trump ha empezado a ver el panorama legislativo en las últimas semanas. Una fuente familiarizada con este cambio dijo a CNN que había quedado claro con la debacle del proyecto de ley de gastos y una estrecha carrera por la presidencia de la Cámara que habrá muy poco espacio para maniobrar dos proyectos de ley separados: uno sobre la frontera y la energía y otro relativo a las políticas fiscales.

Thune y otros senadores republicanos habían argumentado que arrancar el mandato de Trump con un proyecto de ley de política fronteriza y energética —repleto de ideas ampliamente populares del Partido Republicano— y dejar para más adelante el proyecto de ley fiscal sería una mejor jugada política que arriesgarse a una prolongada batalla fiscal.

Sin embargo, varios republicanos clave en la Cámara de Representantes, entre ellos el presidente de la Comisión de Medios y Arbitrios, Jason Smith, llevaban meses presionando a favor de un único proyecto de ley, argumentando que dos medidas resultarían demasiado ingobernables en la cámara, donde el Partido Republicano tiene una mayoría extremadamente estrecha.

“Esto demuestra que el mejor y más rápido enfoque para entregar al presidente Trump es un hermoso y gran paquete”, dijo Smith a CNN el mes pasado.

Un proyecto de ley masivo llevará mucho más tiempo de negociación y representará un enorme desafío para un partido que tiene tan poco margen de error. Un proyecto de ley de esta magnitud tendrá que pasar por varias comisiones de jurisdicción y es probable que lleve mucho más tiempo que un proyecto de ley de fronteras y energía más limitado. Cuando Thune expuso su visión tras afianzarse como líder de la mayoría del Senado en noviembre, estableció un ambicioso sprint de 100 días para aprobar un proyecto de ley limitado que abordara la frontera y la energía, pero no la política fiscal.

Si bien los senadores argumentaron que la estrategia de dos proyectos de ley separados ayudaría a lograr una victoria temprana para Trump —ya que una revisión fiscal más un paquete de medidas sobre la frontera y la energía llevaría más tiempo—, muchos en la Cámara de Representantes se preocuparon por la posibilidad de desperdiciar el impulso para el resto de la agenda de Trump. A varios republicanos de la Cámara de Representantes les preocupa que el Congreso no reciba un “segundo mordisco a la manzana”, según varias personas familiarizadas con las discusiones, y no quieren dejar de lado la política fiscal, que fue una de las plataformas clave de la campaña de Trump.

Mientras los republicanos intentan trazar una estrategia clara para la agenda de Trump a pocas semanas de su toma de posesión, la promesa de un único proyecto de ley ayudó a Johnson a ser reelegido como portavoz el viernes, dando una victoria temprana a Trump, que había respaldado al republicano de Louisiana y había hecho llamadas en su nombre. También ayudó a la bancada a evitar una lucha prolongada, que el presidente electo había advertido que podría socavar la confianza en el relevo republicano en Washington.

El representante republicano Rich McCormick, de Georgia, dijo a CNN el viernes que Johnson y la promesa del equipo de Trump de impulsar un solo proyecto de ley le ayudaron a votar a favor del presidente de la Cámara.

Y el representante republicano Keith Self, de Texas, que cambió su voto y apoyó a Johnson en el último minuto, también dijo a CNN el viernes que esperaba hacer un proyecto de ley “grande y hermoso” ahora que la carrera por la presidencia de la Cámara había terminado.

Al describir la conversación con Trump que le llevó a cambiar su voto, Self dijo: “El mensaje fue claro”.

“El mensaje fue que él quiere lo que todos los demás quieren: que se apruebe su agenda”, dijo Self. “Y ese fue mi mensaje para él: ‘Señor presidente, necesitamos un equipo negociador fuerte’”.

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